Monterrey, Nuevo León, México.- (SECOSICE) La violencia continúa expandiendo el temor en México. El lunes, el jefe de la policía en el estado de Chihuahua fue asesinado. Una mujer estadounidense fue asesinada por la violencia relacionada con las drogas en Juárez este martes.Monterrey, donde los misioneros John y Jeanne Herrin de The Mission Society enseñan, ya no es la ciudad más segura de América Latina. En términos de ministerio, John declara que la violencia ha afectado su trabajo de muchas maneras.
"Hemos tenido que cambiar algunas de las cosas que hacemos y pasarlas a los fines de semana. Nada ha detenido el trabajo por completo, pero nos ha hecho retroceder y cambiar la manera en la que hacemos las cosas", explica.
Muchos equipos misioneros a corto plazo han cancelado sus viajes debido a la violencia.
Aunque él no agradece por la violencia, comenta: "Nos permite entrar en las vidas de una manera en la que no pudimos hacerlo antes, y debido al malestar y los temores en la vida de las personas, están buscando respuestas como nunca antes. Entonces vemos que, de hecho, la ciudad se está abriendo al evangelio mucho más que en pasado".
John Herrin pide oraciones para que los equipos misioneros a corto plazo puedan regresar y por seguridad para sus obreros.
